Por Ronaldo de León
Para esta obra, Orozco se basó en cerca de 200 fotografías de los últimos años de vida de Fernández.
La escultura destaca por su realismo, capturando con detalle las facciones y expresiones característicos del intérprete de rancheras.
Orozco hizo hincapié en la autenticidad del cabello utilizado, optando por cabello natural para permitir un peinado realista.
El tributo escultural se ha convertido en una manera conmovedora de recordar y honrar la memoria de Vicente Fernández, quien dejó un legado imborrable en la música ranchera y en la cultura popular de México.
La escultura se encuentra en exhibición en Guadalajara, siendo una pieza que refleja el impacto duradero del "Charro de Huentitán".
Fuente:
-Reporteros en Acción
Asombroso