Por Ronaldo De León
Malasia. La historia de una abuelita ha conmovido a miles de usuarios en las redes sociales, debido a que trabaja como estatua para ganarse la comida y así poder alimentar a su nieto de 2 años.
La mujer de 60 años se dedica a interpretar a una estatua viviente para ganarse la vida, pues su condición de pobreza se agravó con la pandemia a nivel mundial.
La historia se hizo viral en diferentes medios de comunicación ya que la mujer mayor he hecho todo lo que está en sus manos para alimentar a su pequeño nieto Reihan de 2 años, luego del divorcio de sus padres.
Según medios locales, Reihan fue el primer hijo del matrimonio fallido que, luego de la separación, ambos padres decidieron abandonar al niño.
Ante esta situación, su abuela decidió cuidarle, pero no contaba con los medios suficientes para mantenerlo.
A raíz de la pandemia por Covid-19, Mumun fue una de las millones de afectadas en el país oriental y se quedó sin trabajo por lo que decidió invertir el poco dinero que tenía en un bote de pintura plateado y dedicarse a entretener a los peatones de un cruce cerca de la provincia Tangerang.
De esta forma la abuelita del pequeño se gana la vida, aproximadamente 6 dólares al día, dinero que invierte en la leche y arroz para que coma su nieto.
Con su nieto en brazos, pintada con tono plateado en las partes visibles de su cuerpo y con una caja de cartón en el piso para recolectar las monedas, la señora Mumun se gana la vida para alimentar a su nieto.
Las personas de buen corazón depositan una moneda mientras ella canta y después vuelve a quedarse estática, la escena se repita hasta que entra la noche y juntos vuelven a casa.
Fuente:
-plumasatomicas.com
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